La paciencia siempre es bien recibida, y da a los demás más tiempo para resolver sus problemas. La paciencia se ve cuando el amor decide darse constantemente por el bien de otra persona. La paciencia no es una forma general de tolerancia que pasa por alto cualquier cosa, sino más bien un inspector sabio de la situación, que permite que se den los pasos necesarios.
La paciencia es la manera en que el amor siempre diluye las cosas negativas.