Hay días en que podemos encontrarnos en el peor de los desiertos, experimentando una soledad tan fuerte que llegamos a pensar que hasta Dios se ha olvidado de nosotros. Pero hoy Él te invita a tener paz, y por más difícil que se vea el panorama, puedes tener la seguridad que ahí mismo enviará a sus ángeles para que te cuiden, para que descanses y recuerdes que jamás estarás solo.
Así que confía y no te preocupes, Dios nunca te abandonará.
OREMOS
Señor, qué bueno es saber que estás conmigo todos los días de mí vida. Amén.
FRASE
Y al final el único que siempre está ahí, es Dios.