Si hoy tropieza, recuerde que tiene un Abogado ante el Padre, Jesucristo, que oye sus oraciones pidiendo perdón y se interesa cuando usted está sufriendo. Dios puede disciplinarle cuando cede a la tentación, pero nunca le retirará su amor.
Usted es su hijo y esta es una verdad que nunca cambia, y debido a que Él es justo, amoroso y firme, tenga la seguridad de que jamás le fallará.