No es arrepentirse y arrepentirse, sino arrepentimiento y frutos de arrepentimiento, y esto implica un cambio de vida, significa no volver a las mismas prácticas del pecado. El pecado parece dulce, pero es amargo al estómago. El pecado promete placer, pero paga con tormento, promete libertad, pero esclaviza, promete vida pero mata.
No huya de Dios por causa del pecado, mejor huya del pecado hacia Dios. Verás que en Él hay perdón, salvación y paz.
OREMOS
Señor, hoy quiero pedirte perdón por mis pecados, me arrepiento y comprendo que no ha sido correcto lo que he hecho. Amén.
FRASE
Arrepentimiento no es cuando usted llora, es cuando usted cambia.