Para muchos, el lema de hoy en día es: “trabajar, trabajar y trabajar”. Pero el Señor nos recuerda que en medio del trabajo, el cual es importante, también es necesario descansar y tomarnos un respiro. Recuerda que el trabajo fue hecho a causa del hombre y no el hombre a causa del trabajo.
Así que haz un alto, tómate un respiro y descansa en las promesas del Señor.