Marta estaba tan distraída con todas sus obligaciones que no pudo captar la importancia de simplemente estar con el Salvador. Y es que estar a solas con Él y experimentar su gran presencia son prácticas cruciales.
Recuerde que el Señor le ama, así que acuda a Dios todos los días, guarde silencio y no se pierda la oportunidad de estar a solas con Él, disfrutando de su presencia.