Independientemente de la forma en que su padre terrenal le haya tratado, su Padre celestial nunca le fallará y jamás le rechazará.
Por tal razón, abrace hoy la verdad de que Él es su Padre, y en cualquier problema que esté enfrentando, búsquelo para que le enseñe y le asegure que usted está en el centro de su provisión, pase lo que pase.