Una de las maneras más dolorosas y destructivas en que el enemigo lo va a atacar, es haciéndole creer que está solo. Sin embargo, eso es una mentira. Dios le ha dado a los creyentes el gran testimonio de sus siervos a fin de que recuerden que Él nunca los dejará ni los abandonará.
Mire a estos hombres y mujeres de la fe y anímese, pues Él no les falló y antes siéntase seguro de que Dios tampoco le fallará a usted.