LA SOBERANÍA DE DIOS

SALMOS 135:6

Un estudio realizado a soldados y pilotos de la Segunda Guerra Mundial, reflejó que los pilotos tenían menos ansiedad que los soldados, y esto era porque ellos tenían el acelerador en su mano, haciéndoles sentir que tenían el control. El resultado es que la percepción de control produce calma, mientras que la falta de control origina temor y ansiedad.

El mensaje real detrás del consejo de Pablo, de alegrarnos siempre en el Señor, es que en lugar de buscar el control de todo, mejor confiémoselo a quien tiene verdaderamente el poder de controlarlo todo, a Dios. 

OREMOS

Dios, deseo ser libre de toda ansiedad, y para esto comenzaré dándote el control total de mi vida, pues sé que cuidas siempre de mí. Amén.

FRASE

En la prueba, la soberanía de Dios es la almohada, sobre la cual apoyas tu cabeza.

Contenido similar...

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *