Muchas veces hacemos las cosas para alcanzar la gloria personal. Pero cuando nuestro mayor deseo es glorificar a Dios y caminar en obediencia, nos transformamos en personas motivadas que buscan amar y servir a Jesús con el poder del Espíritu.
Así que te invito para que todo lo que hagas hoy, lo hagas con el fin de exaltar y glorificar a Dios.
OREMOS
Padre, que todo lo que hoy haga glorifique y exalte tu nombre. Amén.