Crea con cada fibra de su ser que Él cumplirá fielmente sus promesas y no se limite a decir: “Espero que el Señor acuda en mi auxilio”. Exhiba el nivel más alto de Fe al proclamar: “Tengo la certeza absoluta de que mi Padre celestial me ayudará”.
De modo que agradézcale al Señor por responder a sus oraciones y confié, pues sin duda alguna Él cumplirá.