SIN PREOCUPACIONES

FILIPENSES 4:19

Preocuparnos por un problema ya sea económico, familiar, de salud, o trabajo y la solución no está en nuestras manos es como tratar de llegar a un sitio en una bicicleta estacionaria que no nos lleva a ninguna parte. La preocupación no nos da una solución, tampoco cambia nada, y además podemos perder la paz.

Hoy le invito a meditar en el versículo: “mi Dios proveerá nuestras necesidades”.

OREMOS

Señor, cada mañana te entregaré
cualquier preocupación que tenga,
pues confío en Tu provisión. Amén.

FRASE

Confía, los planes de Dios
son perfectos.

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