ÉXODO 20:3
Dios debe ocupar el primer lugar en nuestro corazón, no la pareja, ni el trabajo, ni ninguna otra cosa creada. Es decir, todo lo demás es también importante, pero la prioridad debe ser Dios. Si permitimos que otras cosas ocupen el lugar de Dios, habrá un vacío inevitable y un desorden en nuestro interior, y será como tratar de construir una casa al revés o sin cimientos, todo se caerá.
Que nuestra prioridad sea entonces llenarnos del amor de Él, conocerlo y obedecerlo, para que nuestros sentimientos estén siempre bajo su control.
OREMOS
Padre, ayúdame a organizar las prioridades de mi vida y ser sabio y entendido de cuál es tu voluntad. Amén.
FRASE
Que tu prioridad sea agradar a Dios y no al mundo.