SALMOS 18:2
Mucho de lo que David experimentó, es lo que nosotros también experimentamos en algún momento de nuestra vida. Sabemos que Dios es seguro y digno de nuestra confianza, pero muchas veces las pruebas y dificultades de la vida nos sacuden y exponen la fragilidad de nuestra fe, descubriendo que nuestra confianza en Él no es tan firme como pensábamos. Es por eso que David presenta esta oración, pues él sabía que Dios era su roca y precisamente por eso le pedía: “sé Tú mi roca”.
Repite estas palabras con confianza y descansa en la Roca fuerte, quién siempre cuida de ti.
OREMOS
Padre, sé siempre mi Roca fuerte,
mi alto refugio y mi lugar
seguro. Amén.
FRASE
En Jesús fuerte soy, solo el mi
Roca es.