SALMOS 34:4
El temor es una de las emociones más comunes que enfrentamos. Nos paraliza, nos roba la paz y puede incluso alejarnos de Dios. Es por eso que David hace énfasis en que cuando buscamos al Señor, Él no solo los oye, sino que nos libra de todos nuestros temores. Ahora bien, esto no significa que los problemas desaparecerán, sino que Su presencia nos dará el valor para enfrentarlos con fe. ¡Qué hermosa seguridad saber que no hay temor que tengan la última palabra, cuando estamos en manos del todopoderoso!
Definitivamente, la confianza nace cuando comprendemos que el mismo Dios que venció la muerte está a nuestro lado en cada noche oscura.
OREMOS
Señor, hoy elijo buscarte antes que preocuparme. Llena mi alma de confianza, paz y valor. Amén.
FRASE
Cuando busco a Dios, el temor pierde su poder.