HIJOS DEL REY

JUAN 1:12

Recordar que somos hijos de Dios, lo cambia todo, pues ya no somos huérfanos espirituales, ni andamos sin propósito. Tenemos un Padre celestial que nos ama, nos cuida y nos llama suyos. Esta identidad no depende de cómo nos sintamos, sino de la verdad de su Palabra. Pues hemos sido adoptados por gracia y eso nunca cambiará. Por tal razón, cada vez que el enemigo quiere hacerte dudar de tu valor, recuerda que eres hijo o hija del Dios Altísimo.

Y como sus hijos, podemos acudir a Él con confianza, caminar con seguridad y vivir con esperanza, sabiendo que nuestro Padre celestial nos cuida, nos guía y nunca nos abandona.

OREMOS

Padre amado, ayúdame a vivir cada día con la identidad que me has dado: amado, aceptado y escogido por ti. Amén.

FRASE

Mi identidad está en el amor del Padre.

Contenido similar...

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *