2 CORINTIOS 12:9
La vida muchas veces nos confronta con debilidades, fracasos, enfermedades o situaciones fuera de nuestro control. En esos momentos lo natural sería desanimarse. Sin embargo, el apóstol Pablo nos recuerda algo poderoso, la gracia de Dios es suficiente. Y es que su gracia cubre lo que falta, fortalece cuando flaqueamos y nos sostiene cuando creemos que no podemos más. Dios no siempre quitará el problema de inmediato, pero te asegura que su favor, su presencia y su poder serán suficientes para atravesarlo contigo.
Recordar su gracia, es recordar que no estás solo, que no estás vencido, y que no necesitas demostrar perfección para ser sostenido por Dios.
OREMOS
Dios, ayúdame a recordar que no dependo de mis méritos, sino de tu favor inmerecido. Amén.
FRASE
Su gracia no tiene límites, y en ella somos fuertes.