JEREMÍAS 17:9
Vivimos en un tiempo donde se nos invita a seguir nuestro corazón, pero la Palabra de Dios nos advierte con claridad que el corazón humano, nuestros impulsos, emociones y deseos, no son guiados por el Espíritu, por lo cual pueden ser profundamente engañosos. Y es que muchas veces podemos sentir que algo es correcto simplemente porque lo queremos o nos emociona, pero no todo lo que se siente bien es bueno delante de Dios. Y es por esta razón, que el Señor nos llama a alinear nuestro corazón con Su verdad.
Confiar en Él es rendirle incluso lo que sentimos, para que Él lo transforme y nos dirija por caminos de justicia.
OREMOS
Jehová, ayúdame a rendir cada pensamiento, deseo e impulso a ti, y que mi vida siempre sea dirigida por tu verdad. Amén.
FRASE
Nuestros impulsos cambian, pero la verdad de Dios permanece.