EFESIOS 4:29
Definitivamente, las palabras tienen poder, y con ellas podemos levantar o derribar, alentar o desanimar, sanar o herir. Por esta razón, el apóstol Pablo nos llama a cuidar lo que hablamos. Y es que en un mundo tan ruidoso y lleno de crítica, nuestras palabras deberían de ser diferentes, amando, edificando y mostrando gracia. Cuando escoges hablar con propósito, estás sembrando en otros esperanza, ánimo y dirección. Pero a la vez estás reflejando el carácter de Cristo, ya que a veces una palabra a tiempo puede ser el instrumento de Dios para ayudar a alguien que se siente mal.
Te animo para que hoy examines tus palabras, pues cuando decides hablar con amor, verdad y fe, tú también eres bendecido.
OREMOS
Señor, que mi boca sea un instrumento de tu gracia y mis palabras siempre reflejen tu corazón. Amén
FRASE
Tus palabras pueden ser una chispa de luz en medio de la oscuridad.