MATEO 7:18-20
Si queremos que el resultado o fruto de nuestro trabajo, estudio o lo que estemos haciendo sea verdadero, duradero y bueno, no queda otro camino que la obediencia a Cristo. Todo aquel que quiera que la cosecha de su vida sea abundante, sin pérdida y llena de paz, debe ajustar sus planes a la voluntad de Dios, entonces Él mismo tomará el control de lo que hacemos y nos ayudará para que el resultado de nuestra determinación sea bueno, agradable y conforme al corazón de Dios.
Recuerda que no seremos conocidos por nuestras buenas intenciones, sino por nuestras acciones.
OREMOS
Señor, límpiame para hacer un terreno fértil, que da buenos frutos y que hace tu voluntad. Amén.
FRASE
Tus frutos son los que se encargarán de hablar de ti.