HECHOS 9:3-9
Lo que he compartido días atrás, son las cosas que Dios puede hacer por nosotros para transformar nuestra vida. Cuando tenemos un encuentro genuino con Él, nos lleva a la postración y al reconocimiento. También a la obediencia y a la humildad para que nos rindamos a su voluntad. Enseñándonos a seguir instrucciones y a dejarnos guiar por el camino correcto, buscando una íntima relación con Él, practicando el ayuno para así controlar nuestros apetitos emocionales y carnales.
Un verdadero encuentro con Jesucristo debe producir una transformación de nuestro ser.
OREMOS
Señor, que todo lo que he aprendido en esta semana pueda ponerlo en práctica para continuar en este proceso contigo.
Amén.
FRASE
En Dios cada proceso tiene un propósito.