SALMO 23:4
Cuando las ovejas no quieren avanzar, su pastor les infunde aliento con su vara y callado, pues estas no pueden quedarse en ese lugar, ya que no es el indicado para comer ni mucho menos para descansar. El pastor usa el cayado para halar a la oveja y así rescatarla. Y también usa la vara para defenderla de otros animales o para corregirla y así evitar que tenga un triste final. Qué hermoso es saber que de la misma forma el Señor nos alienta con su Palabra, impulsándonos a seguir avanzando y renovando nuestras fuerzas cuando sentimos que no podemos más.
Él promete darte aliento cada día, no te rindas.
OREMOS
Señor, gracias por cuidarme y alentarme
para seguir avanzando, aun cuando
siento que ya no puedo más. Amén.
FRASE
Tu vara y tu cayado me dan
aliento para vivir.