La fe es probada con situaciones adversas, y hay momentos en los que creer no es una opción, sino la única respuesta a tu problema, sabiendo que solo Dios tiene la última palabra. Así que no dejes que lo que ven tus ojos, venza lo que Él te dijo que sucedería.
La realidad de Dios es mayor a la que hoy estás palpando en tu vida.
OREMOS
Señor, fortaléceme para ver en fe lo que todavía no ha sucedido, pero sé qué sucederá. Amén.