Cuando se sienta cansado y derrotad, recuerde que todo en su vida fluye de su relación personal con Dios. Mientras más estresantes y exigentes sean sus circunstancias, mayor será su necesidad de experimentar la presencia De Dios, no menor. El Padre puede darle la fuerza, energía y la sabiduría que necesita hoy.
Así que acuda al Señor y descanse en su gracia, pues con certeza hallará en su Presencia todo lo que usted necesita.