Un espíritu rencoroso es un gran tumor maligno en el alma de una persona que se extiende como el cáncer. Por tal razón recuerde cuán a menudo Dios le perdona, y comprenda que usted no podrá disfrutar verdaderamente del gozo del perdón de Dios mientras no siga su ejemplo y perdone a los que le han ofendido.
No permita que el cáncer de la amargura continúe en su corazón, pues la vida es más dulce cuando el corazón es tierno y no está manchado.