Nadie vive libre de problemas, dolor o tropiezos, sin embargo, el Señor no solo le protegerá de un daño duradero, sino que también usará las dificultades a fin de equiparle, prepararle y fortalecerle para la próxima etapa de su vida. Por consiguiente, pídale a Jesús que le guíe y aligere sus cargas.
Él le hará libre para que llegue a ser todo lo que Dios quiere que sea, ya que conoce perfectamente la manera de sanarle por completo.
OREMOS
Señor, yo no puedo alcanzar mis cargas, pero Tú sí puedes, gracias por librarme de ellas y sanarme. Amén.
FRASE
Todo parece imposible hasta que decides entregarle tus cargas a Dios.