Dios quiere que aprendas a rendirlo todo a Él y de esa manera podrás fluir en la vida tranquilamente, permitiendo que el Señor haga a su tiempo lo que necesita hacer.
Así que no trates de hacer que las cosas sucedan a tu manera, esfuérzate, pero no fuerces nada. Y recuerda que todo tiene su tiempo.
OREMOS
Señor, que tu tiempo sea mi reloj y tu voluntad mi camino siempre. Amén.