Cuando estás rodeado de personas, trabajos y muchas otras cosas, se vuelve algo difícil escuchar lo que Dios quiere decirte, por lo tanto Él llamará tu atención así como lo hizo con Moisés por medio de una zarza.
Cuando esto suceda, no tengas miedo solo escúchalo, pues Dios ha preparado algo especial para ti.