Cuando tu mente se rehúse a creer que todo saldrá bien, no tienes por qué desconfiar pues quien realmente controla todo es Dios mismo. Hoy es un gran y buen día para recordar que Él siempre nos ha cuidado y esta vez nos será la excepción.
Así que descansa, confía y no dejes de creer, porque sin duda tenemos al único y gran Dios que cuida de los suyos y si te apoyas en Él encontrarás descanso. Recuerda Dios te cuida y protege siempre.
OREMOS
Señor, gracias por cuidar siempre de mí vida y en cualquier circunstancia. Amén.