Es muy fácil hacer trampa si pensamos que nadie nos ve. Sin embargo, la falta de honradez afecta el mismo corazón de la persona haciendo que nadie confíe en él y que este no confíe en nadie. Por tal razón no tome la deshonestidad a la ligera pues incluso la porción más pequeña contiene suficiente engaño para matar su vida espiritual.
Así que si existe alguna deshonestidad en su vida, dígaselo ahora mismo a Dios y sea libre.
OREMOS
Señor, perdóname por todas aquellas veces en que he actuado de maneras deshonestas. Amén
FRASE
Ser honesto no es fácil, pero la libertad que trae merece la pena.