Todas las palabras de Dios son rectas y verdaderas y por tal razón se puede confiar en ellas. Dios a diferencia de las personas no miente, no cambia sus palabras, ni deja de cumplir sus promesas.
Así que podemos confiar en la Biblia porque en ella están las palabras del único Dios santo, quien es confiable e incambiable.
OREMOS
Señor, he decidido creer y confiar en cada una de tus palabras, pues sé que no mientes y cumples lo que prometes. Amén.